Algunos adultos mayores conservan desde su juventud el hábito de ahorrar lo que les ha favorecido en su vejez. Otras personas atraviesan apuros porque no guardaron para su retiro.
Sin embargo, nunca es tarde para ahorrar de manera planificada. A continuación le ofrecemos algunas recomendaciones para ayudarlos en esta tarea.
Empecemos con la elaboración de un presupuesto diario, semanal o mensual y trate de cumplirlo en la medida de lo posible.
Destine parte de su dinero al ahorro para tener un respaldo económico ante cualquier emergencia.
Revise sus deudas, no asuma nuevos compromisos y elabore planes de pago.
Otro consejo aplicable es que el adulto mayor se libere de las deudas lo antes posible, de preferencia antes de los 65 años.
Guardar un capital de dinero debe ser un hábito que le permita a un senior no atravesar apuros financieros.
Priorice los gastos de vivienda, alimentación, salud y vestuario.
Reduzca los gastos innecesarios. Incluso y considere la posibilidad de mudarse a un hogar más conveniente, si tiene problemas con los pagos de vivienda.
Muchos adultos mayores usan sus ahorros para ayudar a miembros de su familia que tienen problemas financieros. Si es su caso, evítelo.
El ahorro debe tener un objetivo. Si un adulto mayor quiere guardar dinero, su mentalidad debe apuntar a la obtención de algún bien dentro de un corto, mediano o largo plazo.
Puede ser un rubro para gastar dinero en unas futuras vacaciones, entretenimiento o ciertos antojos, aprovechando que los hijos ya no viven con usted.
Otro objetivo es invertir en mejoras de bienes muebles que luego pueda alquilar o vender.
Invierta en oportunidades que sean potencialmente rentables como una casa, un terreno o un pequeño negocio. No obstante, antes de hacerlo, evalúe primero cómo están sus posibilidades.
Opte por pequeñas labores remuneradas que no requieran de mucho desgaste físico y mental. La idea es vivir sin apuros en edad avanzada.
Foto de Karolina Grabowska
